Hoy, por aquello de variar un
poco, voy a hablar de una cosa que, más que rabia o miedo, me da asco. Es un
acto deleznable, vomitivo, nauseabundo, repugnante y angustioso; seguro que, a
estas alturas, ya habréis adivinado de qué estoy hablando ¿no? Efectivamente,
hablo de la gente que escupe mientras fuma.
No sé si es porque,
personalmente, ya encuentro repugnante el hecho de fumar: desde el olor de los
fumadores, el asco que da el humo que te tiran a la cara o el hecho de que tienen
la pequeña manía de tirar las colillas por todas partes, adornando así nuestro precioso
paisaje urbano. Pero si a esto le añadimos unas pequeñas y viscosas lagunillas
de babas marrones, obtenemos un perfecto cóctel de porquería y repelús.
Tengo que decir que no todo el
mundo que fuma escupe, sería caer, por mi parte, en un estereotipo y ya sabéis
que no me gusta caer en estereotipos…(jijijijijijijijijijijijiji) Pero a lo que
vamos: ¿Por qué? tengo entendido que si fumas tabaco de liar, te queda en la
boca un sabor amargo; pero que cojones, estas aspirando el humo de un montón de
paja marrón por puro placer ¿A qué carajo quieres que te sepa la boca? ¿A bizcocho
de fresa? Deja de fumar esa porquería joder, y dejaras de lado el mal sabor y
de tener que escupir lapos marrones y putrefactos que, cuando la gente pisa sin
querer, se caga en tu pu** madre.
Pero es que hay gente que no fuma
cigarros de liar, sino de los otros, los normales, y es una regadera igualmente ¿A estos que les pasa? ¿Les jode
que su cigarro no sepa a mierda y quieren ser como los otros? Estos son
masoquistas. No sólo pillan el mal vicio de fumar, sino que también pillan el
mal vicio de escupir por que sí: el pack completito.
Como un día me parta la pierna
por haber resbalado con vuestras porquerías, dedicaré mi vida a hablar muy mal
de vosotros para, además de tener jodidos los pulmones y la boca deshidratada,
os piten muchísimo los oídos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario